Estoy aquí, con la mirada perdida y con la mente en blanco,
buscando un rastro en el camino, una pista que seguir,
pero no la encuentro. Estoy perdido.
Me siento a buscarte, guiándome por la brújula roja y etérea,
que me guió en el pasado,
pero ya no me sirve. Estoy perdido.
Por fin Moisés, te he estado esperando.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu entrada,sentida y profunda.
Besos Conchi
Gracias, Conchi, a ver si volvemos...Besos
ResponderEliminar