14 enero 2017

¿Qué he visto? El florido pensil. Niñas de Andrés Sopeña

OPINIÓN

Ayer vi en el teatro Cuyás El florido pensil. Niñas de Andrés Sopeña, una versión femenina de la exitosa obra que se representó hace veinte años con mucho éxito. 
La versión que nos trae Tanttaka Teatroa es una versión ágil y divertida, que no tenía otro objetivo que contar y criticar lo absurdo del sistema educativo trasnochado que nació con el franquismo. 
La obra está llena de guiños irónicos al espectador que llenaba el teatro Cuyás y que, desde subió el telón, estaban entregados a la propuesta que se les ofrecía en el escenario, quizás porque muchos se sentían identificados con los distintos sketch que proponía la obra, relacionados con la retrógrada escuela nacional-católica de la postguerra que muchos vivimos. 
La actrices estuvieron al nivel que se les esperaba, que no era otro que magnífico y supieron manejar, a la perfección, todos los papeles que les tocó representar.
La puesta en escena muy sencilla, que permitía cambiar de escena con soltura y rapidez, sin que el espectador casi lo notara. 

FICHA TÉCNICA Y ARTÍSTICA


AUTOR: ANDRÉS SOPEÑA, Adaptación Teatral KIKE DÍAZ DE RADA
REPARTO: LOLI ASTOREKA
GURUTZE BEITIA
TERESA CALO
ELENA IRURETA
ITZIAR LAZKANO

DIRECCIÓN ESCÉNICA: FERNANDO BERNUÉS MIREIA GABILONDO


Ayte. Dirección: NAIARA ARNEDO.

Escenografía: EDI NAUDÓ 
Iluminación: XABIER LOZANO 
Vestuario. ANA TURRILLAS 
Técnico: ÁNGEL AGÜERO 
DANI BERNUÉS 
TXEMA GONZÁLEZ 
Regiduría: NAIARA ARNEDO 
Coordinación Técnica: EDI NAUDÓ 
Diseño Gráfico: JAVI ALONSO 
Fotografía: MANIX DÍAZ DE RADA 
Administración: MAITE GORROTXATEGI 
Producción Ejecutiva: ANE ANTOÑANZAS
Ayte. Producción: VITO ROGADO 

SINOPSIS

¡Regresa el Florido Pensil! Pero… NIÑAS
Sí, otra vez el Florido Pensil porque volvemos a la misma escuela; aquella cuyas aulas estaban presididas por la Santísima Trinidad del Crucifijo, la foto del Caudillo y la de José Antonio. Pero, esta vez vamos a entrar por la puerta que tenía grabado en el dintel un cartel que rezaba “NIÑAS”
Eran dos mundos paralelos tan cercanos como distantes, dos universos encerrados en el mismo edificio con dos propósitos (des)ducativos muy diferentes…

Es la historia del día a día de cinco muchachas sometidas a la absurda e ilógica brutalidad del sistema educativo que dominó la España de la postguerra. La escuela es el reflejo de la sociedad y de su ideología dominante. Y esa ideología había decidido poner al día el más profundo patriarcado medieval, y llevarlo a sus últimas consecuencias. La mujer fue el principal objeto de la empresa moralizadora, pues resulta que la mujer estaba naturalmente destinada para el matrimonio y para las labores domésticas. Su carrera profesional venía a ser formar una familia y tener prole. Y en eso se ponían de acuerdo prácticamente todas y todos: la maestra, el cura, los padres, los moralistas, las cupletistas, las escritoras de novelas rosas, y hasta las profesoras de gimnasia… En todos los escenarios de la acción se verá reflejada, a veces a las claras y a veces mediante retorcidos rodeos, que sólo existían dos tipos de mujeres: las decentes y las otras…

Desde el estreno del Florido Pensil en 1996 TANTTAKA era consciente de que había contado una parte importante de la (des)educación practicada por la escuela nacional-católica, pero no todo. La obra se ceñía al punto de vista masculino. Les faltaba la otra parte del currículum, el otro lado del patio de recreo, la mirada desde la puerta de al lado; el mundo de las niñas.
Ellas sufrieron doblemente esa des-educación, primero como alumnas y después como mujeres, ya que lo que la escuela pretendió con ellas fue industrializar la producción de amas de casa a base de materias como “labores” u “hogar”. Siempre habían querido hablar de esa doble tenaza que aprisionó ideología y moralmente a la mujer en la España de Franco. Las circunstancias han hecho que se retrasara el momento. Pero ahora, por el encargo de la reposición del Florido con motivo de su vigésimo cumpleaños, han rescatado esa idea de hacer la versión femenina.