Después de leerme Vector Robin Cook, un libro entretenido, pero que no voy a recomendar, tengo ya en mi mesilla de noche El ángel más tonto del mundo de Christopher Moore.
He leído algunas críticas que lo han puesto a caer de un burro, y otras lo han puesto por los cielos. Entonces, ante esta diversidad de opiniones, pues lo voy a leer. Ya les contaré.