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| Fuente de la imagen: Pixabay |
Cuando entré, no pude evitar mirarle su exuberante escote. Me detuve durante unos segundos, los suficientes para pensar que tenía unas hermosas tetas, luego levanté la mirada y vi que tenía unos hermosos ojos negros. Me sonrió y yo le sonreí. Pensé que pensó que:
- Todos los tíos son iguales, que solo follan (perdón, piensan) en lo mismo.
- Me habré pasado con el escote.
- Es que tengo unas tetas de escándalo.
- Mi dinero me han costado y tengo que sacarles rentabilidad.
- Este tío es un descarado y un guarro.
Ella se fue y no pude evitar pensar en que...,bueno en fin, ese día mis niveles de testosterona estaban por las nubes, por decir algo, pero la tía estaba muy buena.
También en:
https://steemit.com/spanish/@moises-moran/el-escote
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jjaja! buenisimo!
ResponderEliminarMe pasa, y pienso en todas las opciones, menos en lo que me costaron! (o la genética cuesta el soportar a los padres que nos tocan? ja)
Lila, los genes, en unas ocasiones te ayudan y otras veces, te preguntas porqué a mí. Besos.
ResponderEliminarMi explícito este mini relato. Puro reflejo de lo piensan los hombres y que una mujer se pueda sentir orgullosa de ser admirada.
ResponderEliminarUn beso.