15 octubre 2016

¿Qué he visto? Sabor a miel de Shelagh Delaney

     
        Sabor a miel


En estos días he visto Sabor a miel de Shelagh Delaney que emitida por TVE el 4 de Diciembre de 1981 en su espacio Estudio 1 y que he podido ver gracias a su sección A la carta.
Decir que el texto de Shelagh Delaney es un texto interesante y muy actual, aunque le falta, para mi gusto, un poquito más de mordiente, porque el conflicto que plantea la autora da para mucho más. 
Nada que decir de los actores Emma Penella, Tina Sainz, Manuel Galiana y Antonio Canal que estuvieron a un gran nivel como no podría ser de otra forma.

14 octubre 2016

Quinientos gramos

Él era su segundo hijo, el más pequeño, el que casi no sobrevive, el que estuvo más de diez minutos entre la vida y la muerte, más de dos meses en una incubadora sorbiendo hálitos de vida y ganarle, día a día, unos gramos a la vida.  
Al entregarle el paquete, lo miraba, le temblaba la mano al dárselo, se quedaba en silencio mientras él abandonaba la panadería y sonreía cuando volvía antes de cerrar. 
Sin embargo, ella sabía que un día no regresaría y sabría que se lo habían matado, como a un perro, en cualquier esquina del barrio, para robarle los quinientos gramos de farlopa que había en el paquete. 
«Así era el negocio y las cuentas hay que pagarlas. De hacer pan no se vive, querida.», le dijo su segundo marido cuando perdió a su primer hijo. Aún le quedaban dos de sus hijos en la lista. 

¿Qué he leído? Pudor de Santiago Roncagliolo

OPINIÓN

Ayer terminé de leer Pudor de Santiago Roncagliolo, que es la segunda novela que me leo de este autor, que fue Óscar y las mujeres, y esta me ha gustado mucho más, con un registro distinto. Esta novela es muy interesante, muy bien escrita, con esa prosa sencilla y sin más pretensiones que contar una historia. Me gustó. 

FICHA TÉCNICA

Páginas: 184 págs.
Editorial: Alfaguara
Lengua: CASTELLANO
ISBN: 9788420467306

SINOPSIS
«Esta es una novela sobre la intimidad, sobre los deseos y los miedos que no confesamos ni siquiera a quienes más queremos, sobre los secretos con que nos protegemos para que los demás no nos hagan daño. Sus personajes son un hombre que va a morir, una mujer que recibe anónimos pornográficos, un niño que ve cadáveres, un gato que quiere sexo, esa clase e gente. Como muchas familias, todos esos Personajes viven juntos y todos están solos.» 

11 octubre 2016

La repugnancia

Pixabay

Ella pensaba que por qué no se limpiaba al darle el pan. Sí, pensaba que era una guarra, de esas que solo piensan en sí mismas y que le importa un carajo los demás. No entendía qué había visto él en ese adefesio mal parido. Él, tan pulcro, tan delicado, tan atento, con esa sonrisa que te comía el alma y esa mirada arrebatadora que te desnudaba. Sí, muchas veces esperaba por él, disimulaba mirando el género y cuando él estaba en el mostrador, se acercaba, sonría y esperaba su sonrisa y su mirada. Ese momento la hacía más que feliz.

También en:
https://steemit.com/spanish/@moises-moran/la-repugnancia


10 octubre 2016

¿Qué he visto? La estupidez de Rafael Spregelburd

Fuente: http://feelgoodteatro.com/las-obras/la-estupidez

Ya he comentado que suelo ir al teatro sin saber qué veré, solo conozco el título y los actores que intervienen, aunque, en este caso, sabía que de comedia iba la cosa y que la obra duraba tres horas incluido el pertinente descanso. 
He de reconocer que lo de las tres horas me parecía un handicap y esperaba que ese obstáculo fuese fácilmente superable por la propuesta de la obra. 
Lo cierto es que La Estupidez me pareció ágil, aunque a veces atropellada y confusa, con el ir y venir de los cinco actores que interpretaban a veinticuatro personajes; todo un reto actoral y que los actores salvaron con la máxima nota.
Los únicos peros que le pondría a la obra son su duración y el texto. La duración me pareció excesiva. Creo que le sobraba algunos personajes e incluso de algunas escenas. El texto de Rafael Spregelburd no llegó a convencerme, quizás porque le faltó ese hilo conductor, ese esquema argumental que conectara a todos los personajes y que nunca ocurrió.

LA PUESTA EN ESCENA

La escenografía que nos propone Elisa Sanz es un pilar básico, sobre el que pivota todo el engranaje que la obra nos propone y hace que esta se desarrolle con la fluidez que percibimos. Quizás el único elemento que se podría mejorar es el sonido, porque, en muchas ocasiones, no se oían las voces de los actores.

LOS ACTORES

Ainhoa Santamaría, Toni Acosta, Fran Perea, Javi Coll y Javier Márquez fueron, sin duda, lo mejor de la obra, para quitarse el sombrero y hacerles la ola a todos y cada uno de los actores porque se dejaron la piel encima del escenario. Decir que estos cinco actores interpretaron a veinticuatro personajes, sí, han leído bien, veinticuatro (24). Estos fueron los personajes:

Tengo que destacar a Toni Acosta que realizó una interpretación magnífica y debería hacer muchas más incursiones en el mundo teatral y también Ainhoa Santamaría que bordó a todos los personajes que interpretó.

LA DIRECCIÓN

Fernando Soto realizó un trabajo encomiable con la ayuda de Laura Ortega, ya que poner en escena una obra como La Estupidez no es tarea fácil desde el punto de vista de la dirección, porque hay que conjugar muchos elementos y entre ellos a veinticuatro personajes que entran y salen de escena, que tienen que hacer en el momento preciso, en el que no cabe error y, en el caso que nos ocupa, nos los hubo.

EL TEXTO

Ya dije que el texto de Rafael Spregelburd no me convenció, porque a su texto le faltó esa argamasa que uniera a todas las partes que vimos en escena, que algunas de esas partes estaban cogidas con pinzas y que si se hubieran eliminado, no hubiera pasado nada, el texto se hubiera representado de igual manera. A no ser que esa fuese la intención del autor, presentarnos diferentes partes, sin una conexión aparente y yo no llegue a descubrir y que, en este caso, solo pretendiera darle voz a los actores, que se consigue, pero en el teatro también tiene que tomar la palabra el texto, si no lo hace, algo hemos perdido en el camino.

SINOPSIS

Lo que ocurre en Las Vegas, no siempre se queda en Las Vegas.
LA ESTUPIDEZ es una obra de Rafael Spregelburd que versa sobre la fragilidad de la inteligencia en los tiempos que corren.
Un grupo de personas intenta hacerse rica en Las Vegas. Un método matemático para ganar a la ruleta guarda relación con la temible ecuación que encripta el secreto del Apocalipsis. Dos criminales deben vender un cuadro antiguo robado antes de que se termine de deteriorar por completo. La mafia siciliana fabrica una nueva estrella del pop y unos policías motorizados viven una intensa historia de traiciones.
Todo esto ocurre al mismo tiempo. Y en Las Vegas.
Suerte de road-movie, pero en formato teatral, LA ESTUPIDEZ nació como un encargo a Spregelburd en agosto de 2000 por el prestigioso Deutsches Schauspielhaus de Hamburgo. A partir de ahí, la obra ha despertado curiosidad e interés en diversos ámbitos: recibió el Premio Tirso de Molina en España en 2003. Fue seleccionada para su traducción por el National Theatre de Londres, y se ha representado en numerosas plazas importantes en todo el mundo, como la Schaubühne de Berlín, el Theaterhaus de Stuttgart y el Teatro Helénico de México, entre otros.
LA ESTUPIDEZ es parte de la Heptalogía de Hieronymus Bosch, un grupo de siete obras sobre el tema de los pecados capitales. Parte del atractivo del espectáculo es que los cinco actores del grupo dan vida a los 24 personajes.
Lo que ocurre en Las Vegas, no siempre se queda en Las Vegas.

09 octubre 2016

El roce furtivo


Fuente de la imagen: Pixabay
A él no le importaba, él se quedaba con el instante en que sus manos se rozaban y se intercambiaban una mirada furtiva, mientras le pagaba. Luego llegaba a casa con la mancha en el pulgar y en el índice derechos, subía por las escaleras despacio, pensando solo en él, en su mirada y moviendo los dedos, sintiendo la textura de la harina como si fuera el tacto de su piel. Luego se detenía delante de la puerta, se limpiaba los dedos en la pernera del pantalón y sonreía porque a su mujer nunca le gustaron las manchas de harina.

También en: 
https://steemit.com/spanish/@moises-moran/el-roce-furtivo

07 octubre 2016

¿Qué he leído? Panorama desde el puente de Arthur Miller


Después de ver la obra en el teatro Cuyás y de hacer la correspondiente crítica, sentí la necesidad de leerme el texto, porque me pareció que la versión que había visto pues no me resultaba todo lo dramática que yo me suponía y efectivamente así fue, la versión e incluso la interpretación no estuvieron a la altura del texto.

OPINIÓN

Un texto teatral al estilo de Arthur Miller en el que el drama se masca desde el principio y se va desarrollando hasta el clímax final. Muy recomendable.

FICHA TÉCNICA

Páginas: 128 págs.
Editorial: Tusquets Editores S.A
Lengua: CASTELLANO
ISBN: B00XM1MBR4

SINOPSIS

Panorama desde el puente, célebre obra teatral de Arthur Miller, transcurre en los años cincuenta del pasado siglo, en los suburbios portuarios de Nueva York. En ese decorado –dominado por la imponente presencia del puente de Brooklyn– aborda Miller el drama de los inmigrantes ilegales, sobre cuya existencia precaria y clandestina se cierne la amenaza de los funcionarios de Inmigración y la posible expulsión del país. Tal es el caso de Marco y Rodolpho, dos jóvenes hermanos sicilianos, huidos de la miseria de su tierra natal, que se refugian en la humilde casa del estibador Eddie Carbone. Éste, un ser impulsivo, de instintos tan bienintencionados como primarios, vive con su esposa Beatrice y una sobrina, Catherine, una muchacha a la que Eddie quiere proteger obsesivamente del hostil mundo exterior. Entre Catherine y Rodolpho no tarda en surgir una mutua atracción, pero los celos y las sospechas comienzan a atormentar a Eddie y le impulsan a tomar un camino sin retorno.